En la era de la sobreinformación y el scroll infinito, las marcas enfrentan un nuevo reto: captar atención de forma genuina y mantener una conexión emocional con sus audiencias. Para lograrlo, la fórmula más poderosa —y vigente— es la integración de Relaciones Públicas (RRPP) e Influencer Marketing, asegura el estratega en comunicación, Eduardo Almenar.
“Una marca sin narrativa ni aliados estratégicos es una marca que pasará desapercibida”, afirma Almenar, quien ha liderado campañas para marcas emergentes y consolidadas en América Latina. Su visión es clara: la comunicación ya no es unidireccional, sino conversacional. Y en esa conversación, los influencers —especialmente los micro y nanoinfluencers— son actores clave.
Los datos lo confirman
En 2024, el 70% de las marcas mexicanas destinó al menos un 25% de su presupuesto digital a campañas con influencers.
El 72% de los consumidores ha adquirido un producto tras verlo recomendado por un creador de contenido.
El uso de microinfluencers en la CDMX creció 36% en el primer trimestre de 2025.
Instagram y TikTok lideran la conversación, pero WhatsApp y LinkedIn ganan terreno en audiencias específicas.
¿Por qué micro y nanoinfluencers?
Los microinfluencers (10,000–100,000 seguidores) se han ganado la confianza de las marcas por su alto nivel de credibilidad, capacidad de segmentación y conexión genuina con su comunidad. En tanto, los nanoinfluencers (menos de 10,000 seguidores) se destacan por liderar audiencias de nicho, generar conversiones precisas y ofrecer un ROI notable con presupuestos ajustados.
“Con los nanoinfluencers se pueden lograr campañas más efectivas que con grandes celebridades, si se sabe dónde y cómo conectar”, apunta Almenar.
La fórmula para una campaña efectiva
Según el especialista, una estrategia de PR e Influencer Marketing debe construirse con cuatro pilares:
Selección estratégica de perfiles: afinidad y valores compartidos antes que números de seguidores.
Relaciones auténticas: colaboraciones duraderas, no solo transacciones.
Modelos claros de colaboración: pagos, intercambios o experiencias compartidas.Medición de impacto real: más allá de likes, importa el engagement, tráfico, leads y ventas.
Además, el contenido generado por usuarios (UGC), programas de referidos y concursos pueden convertir a los propios consumidores en voceros orgánicos de la marca. “El verdadero éxito ocurre cuando el consumidor habla por ti”, señala.
Asesoría para marcas que quieren crecer desde lo auténtico
Eduardo Almenar, con más de una década de experiencia posicionando marcas en México, Venezuela, Costa Rica y Colombia, actualmente ofrece asesorías personalizadas y gratuitas. Su objetivo: ayudar a emprendedores y empresas a encontrar su voz, conectar con su comunidad y construir una marca memorable.