Billie Eilish, el ascenso de una estrella

Una de las figuras musicales más importante de la última década, es Billie Eilish, una superestrella que parece vivir en un halo de discreción y timidez, pero que su talento rompe los esquemas de lo prestablecido. Su documental “Billie Eilish: The world’s a little blurry” cuenta la historia de madurez de la cantautora y su ascenso a las grandes ligas de la industria del entretenimiento.

Mientras la carrera de Billie despega y se apuntala uno de sus más grandes éxitos, –“Bad guy”–, la cantautora atraviesa por una relación sentimental un tanto tóxica. Pero también se puede ver como su familia es el principal motor que la impulsa a cristalizar sus sueños, en especial su hermano y productor musical, Finneas O’Connell, con quien ha desarrollado los éxitos más importantes de su carrera hasta el momento.

Es muy interesante cómo se plasma en la cinta el amor de hermanos, cómo él la cuida y la protege, pero también se ve claramente la manera en la que ambos son dinamita pura a la hora de crear música. Se refleja en el material que Billie es una chica que continuamente se cuestiona si lo que hace está bien, pues tiene temor de la desaprobación en redes sociales, un fenómeno ya muy común en el que nos involucramos todos, sin embargo es su hermano el que le pone los pies en la tierra y la motiva a hacer aquello que le gusta sin pensar en lo que los demás dirán de ella.

El director del documental es R.J. Cutler, quien ofrece una mirada íntima sobre el viaje de Billie Eilish, una chica adolescente que con solo 17 años, vemos cómo recorre la vida entre giras, en el escenario y en casa con su familia, mientras escribe, graba y lanza su álbum debut “When we all fall asleep, where down we go?”.

Es curioso cómo se retrata el fenómeno de la adulación en documentales como este, donde los artistas se ven inmersos en un mundo de mensajes halagadores, tanto de gente externa, como de las propias personas que están a su alrededor, donde son ellos quienes tienen que buscar la manera de no cegarse ante la fama. Este no es un punto medular de la película, pero sí es una característica que se refleja muy a menudo en proyectos similares a este.

Entre las curiosidades y momentos conmovedores que ofrece la película, resalta cuando Billie conoce a Justin Bieber, su crush de la adolescencia. Tanto ella como su mamá relatan cómo es que verdaderamente sufría de amor por él. También se revelan los problemas físicos que padeció Billie –sobre todo en las piernas– para continuar con su gira, además se ve cómo enfrenta un tic nervioso que la ataca cuando tiene momentos vulnerables. Es un filme entretenido, con momentos musicales especiales.

mm
Kike Esparza

Soy un periodista apasionado del cine, la música y la moda. Tengo una obsesión por contar las horas y estornudar una y otra vez cuando tengo que tomar una decisión. Quiero ser como Carrie Bradshaw.

RosaDistrito

En este blog Kike Esparza habla desde su experiencia, 12 años en el periodismo le han permitido adentrarse y disfrutar de tópicos como el cine, la música, la moda y la diversidad. Rosa Distrito es el espacio que disfrutamos todos.

Encuéntranos en redes sociales.