Recuerdo que cuando era niño ver a Walter Mercado en la televisión dando los horóscopos, me causaba conmoción. Viviendo en una sociedad tan heteronormada, al verlo tan excéntrico, opulento y femenino, una ola de mariposas revoloteaba en mi estómago, sumada la estela de misticismo que era parte de él, lo que yo sentía era fascinante.
Las personas que se dedican o desarrollan un halo esotérico, siempre han llamado mi atención y al mismo tiempo me dan una sensación de escalofrío, como cuando algo puede ser prohibido y sin embargo quieres acercarte a él, por eso cuando supe que había un documental que daba cuenta de los dos últimos años de vida del astrólogo, claro que quería ver su película y conocerlo un poco más, porque cuando yo era niño y lo miraba en el televisor, encontraba que ya no me sentía tan diferente, que alguien más se asemejaba a lo que yo era y estaba experimentando.
El documental, dirigido por Cristina Costantini y Kareem Tabsch, bajo la producción de Alex Fumero, es una carta de amor a uno de los iconos de la televisión latinoamericana, el hecho de que Kareem y Alex sean parte de nuestra comunidad LGBT, también le da otra perspectiva más cálida y diversa al proyecto fílmico, pareciera que los astros se alinearon y las personas correctas se hicieron cargo de honrar a unas de las personalidades queer más adelantadas a su época.
La narrativa es maravillosa, utilizando las cartas del tarot mediante animaciones para adentrarnos en la vida de Walter, un niño de Puerto Rico de familia humilde con un don especial para destacarse de entre los demás. Su diversidad y su elegancia con la que se rigió, lo llevaron al mundo de las artes escénicas donde se desarrolló como bailarín y luego como actor de melodramas, hasta convertirse en el referente de la astrología en el mundo del entretenimiento.
Y como en toda historia de fama y fortuna, también hay un lado oscuro, en el caso de Walter, un altercado legal entre él y quien fuera su representante por muchos años, Bill Bakula, quien fue quien lo encumbró, pero también quien lo llevó a permanecer en la sombra durante al menos seis años en lo que sus diferencias se resolvían en la corte. Luego viene el ocaso, cuando el astrologo se retira y vive de manera ermitaña recordado sus viejas glorias.
Pero, ¿qué hace que alguien se vuelva una leyenda? En el caso de Walter, su originalidad. Fastuoso, andrógino y opulento, el astrólogo fue y es alguien que no pasa desapercibido aun después de su muerte, podrá ser cuestionable si se cree o no en la astrología, pero él nos dio una gran lección de vida, vivir al máximo siendo él mismo sin importar lo que los otros piensen.
De ahí que aunque nunca reveló algo de su sexualidad, ahora es cuando nos cae el 20 que siendo una persona de la diversidad, nos enseñó el camino de lo que es el género fluido, un ser que no estaba peleado con su parte femenina, ni masculina, al contrario, gozando su dualidad. Este documental no solo habla de la vida de una celebridad, también de la de una persona que vivió como quiso hasta sus últimos momentos con mucho mucho amor.
