Desde hace varias semanas se filma en México la nueva serie para Starzplay y Pantaya, “Señorita 89”, serie protagonizada por Ilse Salas, Ximena Romo, Bárbara López, Leidi Gutiérrez, Natasha Dupeyrón y Coty Camacho, bajo la dirección de Lucía y Nicolás Puenzo, Silvia Quer y Jimena Montemayor.
El guion es de María Renée Prudencio y Tatiana Mereñuk, mientras que los productores ejecutivos son los reconocidos Juan de Dios Larraín y Pablo Larraín; las compañías productoras son Fábula, Freemantle y precisamente Pantaya y Starzplay.
La serie que será de ocho episodios, es un thriller ambientado en los 80 donde “Concepción” (Ilse Salas), la matriarca del concurso de belleza más importante del país, junto a un equipo de expertos maquilladores, entrenadores y hasta cirujanos, recibirá en su finca “La Encantada” a las 32 finalistas.
Allí estas mujeres vivirán tres meses de duro entrenamiento hasta llegar al certamen de “Miss México”. Lo cierto es que debajo de las apariencias, la ropa y el maquillaje se encuentra un mundo oscuro en donde al final las concursantes competirán no solo por llevarse la corona, también por salir con vida del certamen.
En la trama, Leidi será “Miss Tijuana”, Bárbara será “Mis Guerrero”, Natasha será “Miss Yucatán”, Coty será “Miss Oaxaca” y Ximena será “Miss Cultura”. “Estoy muy emocionada de estar en este proyecto, rodeada de gente tan talentosa que admiro, para mí este es un sueño y cuando me dijeron que estaba en el proyecto, me pellizqué, no sabía qué hacer. Se está haciendo un gran trabajo con grandes directores. Yo voy a hacer el personaje de Ángeles –Miss Oaxaca– y tengo ganas de que lo conozcan ya, porque aparenta ser tímido, pero conforme van pasando las situaciones, va generando fortaleza y compañerismo con las demás misses”, cuenta Coty.
Por su parte Natasha resalta que este proyecto es una gran oportunidad que critica al patriarcado “y al sistema tan mierda que tenemos”. En ese sentido Ilse Salas también reiteró que se abordarán temas que tienen que ver con el machismo que en los años en los que se desarrolla la historia no eran mal vistos, pero ahora que la sociedad cambió, nos damos cuenta que no tenían razón de ser.
“Estamos hablando de los 80, una época que es muy cercana, por lo tanto quiere decir que mi generación sí crecimos con todos estos condicionamientos sociales y todas las cosas que verán ahí, que nos las dieron a mamar y que hasta ahorita nos las estamos cuestionando y nos estamos enojando. Entonces, es muy fuerte y muy confrontativo abordar temas que normalizamos durante décadas, y diría que durante cientos de años”.
Finalmente, la directora Lucía Puenzo reiteró que en ningún momento se buscó victimizar a estos roles femeninos, “aunque estuvieran en un mundo atroz donde muchas veces eran productos para el consumo de los hombres”.
